Los mercados europeos presentaron un comportamiento mixto al inicio de una semana marcada por una intensa actividad de resultados empresariales, destacando una vez más la influencia predominante de las grandes compañías tecnológicas estadounidenses en el panorama global de inversiones. Según Chris Iggo, director de Inversiones de AXA Investment Managers y presidente del AXA IM Investment Institute, las expectativas hacia estas gigantes tecnológicas, especialmente tras las recientes dudas sobre Tesla y Apple, siguen siendo positivas, subrayando la robustez del sector tecnológico en Estados Unidos en comparación con otras regiones.
Iggo resalta que el crecimiento en Estados Unidos supera al de cualquier otro lugar, con las grandes corporaciones de tecnología de la información (TI) dominando tanto en términos de rentabilidad total como de crecimiento de beneficios. Este sector ha contribuido aproximadamente a la mitad de la rentabilidad total del S&P 500 en el último año y, ponderado por capitalización bursátil, ha generado alrededor del 50% de los beneficios por acción en el mercado. La continua evolución de la inteligencia artificial generativa y tecnologías similares mantiene el optimismo sobre el futuro del sector.
En 2022, el aumento de los tipos de interés a largo plazo impactó negativamente en las acciones tecnológicas estadounidenses, consideradas inversiones de larga duración, ya que los mayores tipos de interés disminuyen el valor presente de los beneficios futuros. No obstante, la estabilización de los tipos a largo plazo y un crecimiento de beneficios incluso mejor al esperado han mantenido un entorno macroeconómico favorable. Iggo sugiere que la economía estadounidense podría estar experimentando un «no aterrizaje», caracterizado por un crecimiento sostenido y una inflación por encima del objetivo, lo que podría evitar que la Reserva Federal recorte los tipos de interés.
La reciente sorpresa al alza en los datos de inflación de enero, especialmente en el sector servicios, ha reforzado esta percepción, aunque Iggo considera que un escenario de aterrizaje suave sigue siendo el más probable. La posibilidad de una desinflación global impulsada por bajas tasas de inflación en China y la reducción de la inflación en el sector servicios de EE.UU. podría llevar a recortes de tipos a partir de junio, manteniendo a los inversores a la expectativa de las próximas acciones de la Reserva Federal.
Este panorama sugiere que los mercados seguirán observando de cerca las decisiones de política monetaria de la Reserva Federal, especialmente en lo que respecta a sus proyecciones futuras, lo que podría tener implicaciones significativas para el rendimiento de los bonos estadounidenses en los meses venideros.
Fuente: investing.com