A medida que la semana comienza, los mercados europeos -incluidos Ibex 35, CAC 40 y DAX- muestran un comportamiento plano con tendencias decrecientes. La atención se centra en los crecientes problemas geopolíticos, particularmente en el anunciado operativo terrestre en Gaza por parte del ejército israelí. Desde Link Securities, se resalta la preocupación por cómo pueda reaccionar Irán ante dicha operación, ya que aunque ha negado su participación en el reciente ataque de Hamás a Israel, ha insinuado que podría intervenir si percibe que Israel reacciona de forma excesiva.
El conflicto ha tenido claras repercusiones en los mercados en los últimos días, especialmente en el mercado de bonos. A pesar de que el alza en el precio del petróleo genera presiones inflacionarias que suelen afectar negativamente estos activos, el nivel de incertidumbre generado por la tensión en Oriente Próximo ha llevado a que los bonos se comporten ocasionalmente como «activos refugio». Esto ha producido variaciones significativas en sus rendimientos y una volatilidad notable tanto en el mercado de bonos como en los mercados de acciones.
En cuanto a los resultados empresariales, la mayoría de las empresas que han presentado informes están superando las expectativas. Sin embargo, desde Bankinter señalan que estos resultados positivos podrían quedar en segundo plano si la situación en Israel se intensifica. Aunque consideran que la probabilidad de un empeoramiento grave es del 30%, admiten que predecir los acontecimientos en torno a esta situación es complejo. Sin embargo, un punto positivo es que las tensiones en la región han llevado a los bancos centrales a adoptar posturas más dovish, disminuyendo así la posibilidad de otra subida de tipos por parte de la Reserva Federal. Esto, a su vez, ha generado que las valoraciones bursátiles se vuelvan más favorables.
El escenario económico actual, marcado por una desaceleración con una notable brecha entre Estados Unidos, Europa y China, también está influyendo en la percepción del mercado. En Renta 4, se subraya que a pesar de que las subidas de tipos pueden estar llegando a su fin, es poco probable que comiencen a bajar pronto. Además, cualquier disminución que se produzca será probablemente menor a la inicialmente esperada. Esta perspectiva de tipos de interés altos durante un periodo prolongado tiene el potencial de afectar tanto el ciclo económico como los beneficios empresariales a largo plazo.
Fuente: investing.com