El presidente estadounidense Joe Biden ha emprendido un viaje hacia Israel en un momento crucial, marcado por el recrudecimiento de las tensiones en Oriente Próximo. Esta tensión ha sido avivada por el reciente ataque con misiles a un hospital en Gaza, resultando en la trágica pérdida de cientos de vidas palestinas. Mientras que las autoridades palestinas señalan a Israel como responsable del ataque aéreo, Israel argumenta que la tragedia fue producto de un lanzamiento fallido de cohetes por militantes palestinos. En medio de este juego de culpas, una cumbre planificada con la participación de Biden, el presidente palestino Mahmud Abbas y el líder egipcio Abdel Fattah al Sisi fue cancelada.
Dado el escenario, Biden tiene previsto un encuentro con el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu. Sin embargo, las circunstancias actuales hacen que la esperanza de un avance significativo sea mínima. Paralelamente, el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas buscará votar una resolución para establecer pausas humanitarias, con el fin de facilitar la entrega de ayuda a Gaza.
Mientras tanto, los mercados financieros muestran signos de inquietud. Los futuros de las principales acciones estadounidenses experimentan leves descensos, en una jornada donde se continúa prestando atención a los resultados trimestrales de las empresas. Hasta el momento, un alto porcentaje ha superado las expectativas en beneficios y ventas. Sin embargo, algunas empresas, como United Airlines y JB Hunt, han acaparado la atención por diversas razones, incluyendo previsiones decepcionantes y resultados por debajo de las expectativas, respectivamente. Además, se esperan datos adicionales sobre la construcción de viviendas y las licencias de construcción en EE.UU.
En cuanto al ámbito tecnológico, se aguarda con expectación los resultados trimestrales de Netflix. A pesar de un trimestre previo no muy favorable, los inversores anticipan buenas noticias. Las recientes medidas adoptadas por la plataforma para limitar el uso compartido de cuentas pueden haber impulsado el crecimiento de sus suscriptores. Asimismo, Tesla, tras haber revelado sus cifras de producción y entregas, también se prepara para anunciar sus resultados financieros.
Mirando hacia Asia, las cifras económicas de China han generado un optimismo cauteloso. Su PIB del tercer trimestre ha superado las previsiones, evidenciando un crecimiento del 4,9% en comparación con el año anterior. Aunque este dato refleja una desaceleración respecto al segundo trimestre, sigue siendo más prometedor de lo que los analistas habían anticipado. Otros indicadores, como la producción industrial y las ventas al por menor, también muestran signos alentadores.
Sin embargo, no todo es positivo para el gigante asiático. La estabilidad de su economía podría verse amenazada por los problemas en el sector inmobiliario. El prominente desarrollador Country Garden se encuentra en el ojo del huracán por rumores de un incumplimiento de pago de deuda, lo que podría desencadenar una reestructuración de deuda corporativa de gran envergadura en China.
Para culminar, los recientes eventos en Gaza han tenido un impacto en los precios globales del petróleo. Tras el ataque al hospital, los precios han experimentado un alza significativa debido a las preocupaciones sobre posibles interrupciones en el suministro desde una región tan rica en petróleo. Además, datos recientes sugieren una disminución en las reservas de petróleo en EE.UU., lo que agrega una nueva dimensión a la dinámica del mercado del crudo.
En resumen, la confluencia de tensiones geopolíticas, actualizaciones corporativas y datos económicos está modelando una jornada compleja en los mercados y en la arena internacional. Las decisiones y eventos en las próximas horas y días serán cruciales para determinar la dirección futura en varios frentes.
Fuente: investing.com