El viernes, los precios del petróleo experimentaron un aumento debido a la incertidumbre generada por los mensajes contradictorios sobre la oferta de Rusia y Arabia Saudita antes de la próxima reunión de la OPEP+.
El crudo Brent subió 54 centavos, alcanzando los 76,80 dólares por barril, mientras que el West Texas Intermediate en Estados Unidos registró un avance de 67 centavos, situándose en 72,50 dólares. Estos movimientos se produjeron después de que el viceprimer ministro ruso, Alexander Novak, minimizara la posibilidad de nuevos recortes de producción en la reunión de la OPEP+ del 4 de junio en Viena. Sin embargo, los precios del petróleo podrían verse impulsados por un posible acuerdo para elevar el techo de la deuda estadounidense.
Las declaraciones del presidente ruso, Vladimir Putin, y del ministro de Energía saudí, el príncipe Abdulaziz bin Salman, han generado una perspectiva confusa en el mercado. Putin mencionó que los precios de la energía están acercándose a niveles «económicamente justificados» y sugirió que no habría cambios inmediatos en la política de producción del grupo.
Mientras tanto, el príncipe Abdulaziz bin Salman advirtió a los vendedores a corto que tuvieran precaución, lo que algunos interpretaron como una señal de posibles nuevos recortes de producción por parte de la OPEP+. A pesar de las incertidumbres sobre la demanda mundial y el crecimiento económico, se espera un aumento en la demanda de petróleo en la segunda mitad del año, especialmente en China.
Fuente: investing