Los tipos de cambio centran nuestra atención. Están en el centro de la diana como objetivo de trading debido a su sensibilidad a la política monetaria y a los tipos de interés, los cuales se ven afectados en la actual coyuntura. Uno de los pares de divisas más seguidos por nuestros inversores y nuestro departamento de análisis es el GBPUSD. Además, el ciclo de tipos de interés en ambas economías está de plena actualidad.

¿Existen oportunidades? Veamos.

2022 es un año que representa un punto de inflexión debido a la aparición de la inflación y sus consecuencias en las políticas de los bancos centrales. Ello nos puede dar fuertes plusvalías en nuestros bolsillos. Los bonos a 10 años de UK han alcanzado hoy el 1,75% de yield, nivel máximo desde enero de 2016. El Banco de Inglaterra subió tipos en sus últimas 3 reuniones, y el mercado descuenta un 0,25% de subida en las próximas 6 reuniones al tocar la inflación un 6,2% en Febrero, el triple al objetivo del Banco central.

Por parte del otro lado del Atlántico, un escenario semejante. La Fed está subiendo tipos de interés y anticipando más subidas con un discurso muy contundente de Powell.

No obstante, la Fed, el BCE y el BOE han apostado todo a la recuperación económica. Políticas monetarias y fiscales históricamente expansivas han conducido a sus economías a tasas de fuerte crecimiento. Existe la expectativa de desaceleración del actual nivel de inflación y existe miedo a que las subidas de tipos pueden conducirnos a la recesión, como ha sucedido en ciclos anteriores. Por ello, los bancos centrales se han quedado muy detrás de la curva o niveles inferiores al previsto por la regla de Taylor y esa precaución se ha acentuado al considerar coyuntural el actual repunte inflacionario ocasionado por la guerra. Incluso, el BoE suaviza su tono hawkish al contrario que la Fed.

Así, entendemos la tendencia de depreciación de la GBP frente al USD.